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MERCADAL
FORNELLS
Area de Fornells: El pueblo y La Bahia

     Las aguas tranquilas de la bahía de Fornells han ofrecido, tradicionalmente, abrigo y refugio. Actualmente, esta cala no sólo constituye la base de una pequeña flota marisquera, sino que durante el verano brinda amarres a un gran número de embarcaciones de ocio procedentes de todo el mundo.
     La vulnerabilidad de la cala ante los posibles ataques de flotas invasoras, una preocupación constante a lo largo de la historia de la isla, hizo que los menorquines solicitasen oficialmente al rey Felipe II la construcción de una fortaleza defensiva en 1596. Pero hasta 1625, bajo el reinado de Felipe IV, no se comenzó a levantar un fuerte encomendado a la protección de San Antonio, patrón de la isla.
     En los alrededores de esta fortificación y de la parroquia del mismo nombre - hoy sustituida por un recinto más moderno, de el año 1800 - , creció este pueblo tranquilo de pescadores, en cuyas calles se respira la calma y la forma de vida pausada de los menorquines. En el año 1782, cuando, después de dos dominaciones inglesas y una francesa, Menorca vuelve a la soberanía española, se da la orden de derribar esta fortaleza - de la cual actualmente sólo quedan las galerías subterráneas-, juntamente con el imponente castillo de San Felipe situado en el puerto de Mahón. Una de las primeras órdenes del gobernador inglés Sir Henry Edward Fox, fue la de construir, en 1799, una torre nueva en la bocana del puerto de Fornells. En la bahía hay un tercer fortín militar, también construido por los ingleses, en la isla de las Sargantanas (lagartijas).
     Muy cerca de Fornells, está la playa de Tirant, con dos importantes focos de atracción para el visitante: al Este la urbanización Playas de Fornells, con sus casitas blancas que imitan la arquitectura tradicional menorquina; y al Oeste, el centro de interés turístico de cala Tirant.
     En la misma bahía de Fornells, al Sur del puerto, está la urbanización de "ses Salines". Sus aguas cristalinas al abrigo del fuerte viento del Norte, son especialmente aptas para practicar el surf de vela. Delante, se muestra más inaccesible la Mola de Fornells. En su costa escarpada está la entrada a la cueva de los Ingleses y la impresionante cueva de "na Polida", a la que sólo se puede acceder por mar, desde una barca.